En los últimos años ha aumentado considerablemente el coleccionismo de pegatinas. Seguramente los motivos hayan sido varios: la facilidad de elaboración de diseños a través de un ordenador, la aparición de sitios donde realizarlos de manera sencilla y barata, etc. O simplemente puede que sea debido a una nueva generación de ultras a los cuales les gusta más este tipo de material en lugar de las habituales fotos, bufandas o camisetas.
La proliferación de tantas pegatinas ha dado lugar a un aumento de material falsificado y no original del propio grupo, por lo cual muchas veces no sabes si el material que cambias es o no oficial. Esta es una lacra con la cual hay que luchar y solo comprar o coleccionar material oficial del grupo o autorizado por el propio grupo. La cantidad no va de la mano de la calidad y siempre se nota en el material no oficial.
Queremos con este post, y sucesivos, echar la vista atrás y recordar los años 80-90, cuando los diseños se hacían a mano: fotocopiando, calcando letras en folios sueltos, montando los diseños con tijera y pegamento, haciendo diseños de un solo color, etc. En aquellos tiempos, hacer pegatinas no era tan simple como ahora, las tiradas eran limitadas y se vendían en la propia grada para recolectar dinero para comprar bengalas.
Pasemos a los recuerdos, no sin antes recordar que el material no debería ser solo para coleccionar, sino también para practicar el activismo, tarea que queda eclipsada muchas veces por el intercambio.







